Renuncia enviado especial de EE. UU. para Haití por trato “inhumano” a migrantes
El embajador Daniel Foote asegura que la Casa Blanca no ha tenido en cuenta sus recomendaciones para lidiar con la situación migratoria en la frontera.
Fuentes del Departamento de Estado de Estados Unidos confirmaron este jueves que el enviado especial para Haití, el embajador Daniel Foote, había presentado su renuncia al considerar que los migrantes haitianos habían recibido un trato “inhumano” en la frontera sur del país.
“No voy a estar asociado con la decisión inhumana y contraproducente de Estados Unidos de deportar a miles de refugiados e inmigrantes ilegales haitianos a Haití, un país donde los funcionarios estadounidenses en recintos seguros debido al peligro que representan las bandas armadas que controlan la vida diaria”, escribió el ahora el embajador en su carta de renuncia, que fue difundida por PBS (Public Broadcasting Service).
En los últimos días, miles de migrantes haitianos se han congregado en algunos puntos de la frontera como en Del Río, Texas, aguardando luz verde de las autoridades migratorias para poder entrar a Estados Unidos. Muchos de ellos, en declaraciones a la Voz de América, admitieron haber huido de la isla caribeña por la grave situación política desatada en el país y por las consecuencias de los últimos desastres naturales que han azotado a toda la nación, que ya estaba sumida en una profunda crisis social y humanitaria.
Sin embargo, el Gobierno liderado por el presidente Joe Biden reaccionó a la llegada de grandes multitudes de migrantes haitianos incrementando vuelos desde San Antonio y Laredo, ambas ciudades en Texas, para deportar a los nacionales ilegales que habían emprendido una peligrosa travesía hasta llegar a Estados Unidos.
Según Foote, la política implementada por el actual ejecutivo norteamericano no se alinea con las recomendaciones que él había propuesto ya que fueron desestimadas e ignoradas por la Casa Blanca. “La creciente migración en nuestras fronteras solo crecerá a medida que incremente la miseria inaceptable de Haití”, señaló.
Defendió que los haitianos deben tener la oportunidad de “trazar su propio rumbo, sin titiriteros internacionales y candidatos favoritos, pero con un apoyo genuino para ese rumbo”.
El funcionario del Departamento de Estado, que habló bajo la condición de anonimato, agradeció el trabajo prestado durante sus funciones como enviado especial del Gobierno de EE. UU. para Haití pero consideró que se había excedido en sus funciones.
“Constantemente ha buscado una mayor supervisión, una mayor responsabilidad de una manera que no pensamos que fuera apropiada o prudente en ese momento”, señalaron desde el Departamento de Estado.
Fuente: Vozdeamerica.com