“Tenía todo listo para viajar”: cubanos y nicaragüenses desconcertados por cierre de fronteras de EEUU
EEUU anunció nuevas medidas migratorias este jueves 5 de enero relacionadas a los cubanos, nicaragüenses y haitianos.
WASHINGTON, MIAMI, SAN JOSÉ — Como recibir “un cubo de agua fría”, describió el cubano Daniel -quien prefirió no compartir su apellido por temor a represalias- la medida de Estados Unidos de prohibir el ingreso irregular a través de sus fronteras a personas de Cuba este jueves, al igual que a los haitianos y nicaragüenses.
Daniel, es el segundo de su familia en decidirse a intentar el peligroso camino desde Nicaragua, uno de los pocos países con exención de visado para cubanos, por lo que es usado como trampolín en la ruta hacia EEUU. “Ahora no sé qué hacer, estoy como aturdido, no sé qué va a pasar con el dinero que ya se gastó”, dijo.
“Imagínese que yo tenía todo listo para viajar el viernes, había pagado pasajes y mi familia en Miami había enviado la primera parte del dinero al coyote que nos iba a llevar hasta la frontera y ahora veo esto”, lamentó este joven desde La Habana.
En cambio, para Lisbety Arredondo, una joven recién graduada de Economía en la provincia central de Ciego de Ávila, el anuncio del nuevo programa de visados es “una oportunidad” que no va a desperdiciar. Contó a la VOA que ya le pidió a un amigo ser su patrocinador y que va a intentar aplicar “desde ya porque no hay tiempo que perder”.
“A mí si te soy sincera, me vino bien. Yo no tenía los 15.000 dólares mínimos que te hacen falta para dar ese viaje y no es lo mismo pedir eso prestado, que pedir de favor que me sirvan de sponsor para las visas”, afirmó.
Junto a Venezuela, Nicaragua, Haití y Cuba están entre los países desde donde llevan más migrantes a EEUU.
La isla vive un éxodo histórico, provocado por la seria crisis política y económica actual, lo mismo ocurre con Nicaragua desde el año 2018.
En el año fiscal 2022 llegó hasta la frontera de EEUU un récord de 224.607 migrantes cubanos, mientras que 6.182 balseros fueron interceptados por los guardacostas en aguas de la Florida, el mayor registro desde 2008.
En tanto la cifra de nicaragüenses encontrados en la frontera sur de EEUU durante el año fiscal 2022 fueron 164.600, según datos oficiales; y en tan solo dos meses del año fiscal 2023, la cifra de migrantes originarias de este país es de 55.279 superando las cifras de personas provenientes de países del Triángulo Norte de Centroamérica (Honduras, El Salvador y Guatemala.
Incertidumbre
La nueva medida de Washington toma por sorpresa a muchos migrantes que buscaban llegar a EEUU.
El nicaragüense Marlon Chavarría, originario de la ciudad de Chontales, ubicada a unos 140 kilómetros de Managua, recibió la noticia de que Estados Unidos “cerraría la frontera” en México.
Chavarría, de 25 años, salió de Nicaragua el 6 de noviembre de 2022 pero fue retenido en varias ocasiones por Migración de México por lo que se quedó varado mientras conseguía más recursos económicos para proseguir su viaje.
Pese a las medidas anunciadas por la Casa Blanca asegura que continuará su viaje. “La verdad, la idea es, a como dé lugar, llegar a Estados Unidos porque no me puedo quedar aquí en México ni volver a Nicaragua, ahí me caminan buscando por todos lados”, asegura este hombre vía telefónica a la VOA.
César López, otro nicaragüense originario de la ciudad de Rivas, al sur de la capital, indica que las acciones de Washington lo tomaron por sorpresa, ya que vendió varios artículos para poder llegar a EEUU en los próximos meses.
«Es decepcionante esta medida, en Nicaragua hay pocas oportunidades ya», indicó este hombre de 30 años.
Quienes ya lograron llegar a EEUU previo a estas medidas catalogan las nuevas medidas migratorias como “muy dolorosas” como el cubano Francisco Luis Manzanet Ortiz, quien llegó a Estados Unidos por la frontera con México en abril de 2021, luego de haber quedado varado en la nación azteca por casi dos años.
Ortiz estuvo varado bajo el programa Permanecer en México, durante la administración del republicano Donald Trump.
“Esta situación en realidad es un poco triste con relación a muchas personas que vienen huyendo de regímenes dictatoriales como es el caso de Nicaragua, Cuba y Venezuela”, dijo vía telefónica a la VOA desde el estado de Wyoming, donde trabaja actualmente.
Manzanet, quien procede de Baracoa, en la provincia cubana de Guantánamo huyó de su país hacia México tras pertenecer a organizaciones opositoras por varios años. “Esta situación se la pone difícil ahora a los cubanos, los nicaragüenses a los venezolanos porque en México incluso existen secuestros, secuestran para que los cubanos tengan que pedirle dinero a sus familiares aquí [en EEUU]”.