Condena a cadena perpetua por doble homicidio en tienda de Dinkytown
Un hombre de Minneapolis recibió cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por el asesinato de dos jóvenes en un incidente vinculado a violencia entre pandillas.
Maleek Jabril Conley, de 27 años, fue sentenciado este martes tras ser declarado culpable de disparar a quemarropa contra dos hombres en la tienda Royal Cigar & Tobacco el 3 de diciembre de 2023, en un episodio que conmocionó al barrio de Dinkytown.
Detalles del Crimen
El hecho ocurrió alrededor de las 2:15 a.m. cuando Conley ingresó al establecimiento ubicado en la intersección de la 14th Avenue Southeast y 4th Street Southeast. Según las pruebas presentadas en el juicio, una discusión verbal entre dos grupos derivó en una pelea física antes de que el acusado abriera fuego con una pistola semiautomática. Las cámaras de seguridad captaron cómo Jamartre Sanders y Bryson Haskell, ambos de 24 años y presuntos miembros de la pandilla Lowz del norte de Minneapolis, recibieron disparos en la cabeza y el cuello a corta distancia.
Un empleado de la tienda que intentó intervenir para detener la confrontación resultó herido de bala en los glúteos al interceptar un disparo dirigido a un tercer individuo. Ante el pánico, otro trabajador activó un botón de emergencia que bloqueó las salidas, lo que provocó que Conley rompiera el vidrio de la puerta principal para huir junto a cuatro cómplices en un vehículo Kia robado.
Contexto de Pandillas y Investigación
La Fiscalía del Condado de Hennepin señaló que el crimen estuvo motivado por la rivalidad entre las pandillas Crazi Boyz (del sur de Minneapolis) y Lowz. Conley, identificado como miembro de los Crazi Boyz, habría actuado en represalia por conflictos previos entre ambos grupos. Durante el juicio, se presentaron pruebas forenses, testimonios de testigos y registros de videovigilancia que confirmaron la planificación del ataque.
La investigación también reveló que los cómplices de Conley lo esperaban en el automóvil robado, el cual fue abandonado horas después del tiroteo. El rastreo de placas y análisis balísticos vinculó el arma homicida con otros crímenes relacionados con actividades pandilleriles.
Sentencia y Declaraciones Finales
El jurado declaró a Conley culpable de dos cargos de asesinato en primer grado con premeditación, dos cargos de asesinato en segundo grado intencional, y otros delitos relacionados. En la audiencia de sentencia, la fiscal Mary Moriarty enfatizó: «Disparó a víctimas indefensas en un espacio cerrado, terminando con dos vidas y traumatizando a una comunidad entera. Hoy se hace justicia».